Clima
Nuestra finca cuenta con un clima excepcional de tipo continental, clima único que nos da como resultado vinos longevos y de taninos elegantes.
Clima del valle de Uco
Nuestro clima
Un viñedo ubicado en una latitud excepcional y con un clima tipo continental seco con estación húmeda en el mes de diciembre a febrero.
De grado winkler 2 a 3; grados similares con los que cuentan algunos de los mejores terruños del mundo e ideal para criar vinos de la más alta calidad.
De una gran amplitud térmica que permite una maduración lenta de las bayas lo cual favorece al desarrollo de compuestos polifenólicos tales como los taninos y antocianos, en una relación de 4 a 1. Relación ideal para la elaboración de grandes vinos de guarda, donde los taninos son la columna vertebral de los mismos.
Gracias a esta amplitud térmica las bayas genera una gran producción de ácido málico, precursor de las fermentaciones malolácticas de nuestros vinos tintos y de algunos de nuestros vinos blancos, lo cual nos aporta de mayor longitud en boca, de acidez elegante y natural, bien integrada, donde estas notas son típicas de zonas frescas como es el Valle de Uco..
Heliofanía
Nuestros viñedos en espalderos cuentan con una orientación norte sur, y de una leve inclinación hacia el este, la cuál permite que la radiación solar durante la mañana sea moderada para los racimos expuestos en la cara Este, generando una maduración de bayas optima.
Luego durante las horas más fuertes de radiación, donde el sol esta por encima de la planta, la canópia protege a los racimos bajo sus hojas, evitando quemaduras solares que se traducirían en sabores y compuestos no deseado para un perfil de vino fresco.
En las tardes, la radiación solar de los racimos expuestos en la cara Oeste son alcanzado por los rayos solares de forma más moderada, acompañando de esta manera a una maduración lenta que genera compuestos polifenólicos de calidad.
Temperaturas del Valle
Si bien cada año tiene su particularidad, nuestra finca cuenta con una amplitud térmica ideal que provoca una lenta maduración de las bayas, generando de esta manera mostos de alta calidad enológica.
Las temperaturas máximas, durante la maduración no superan los 34°C, lo cual convierte esta zona en una región denominada “Zona fresca”.
Las temperaturas medias, no superan los 21°C, lo cual genera un desarrollo lento y cualitativo de los compuestos polifenólicos (color y taninos) que posteriormente se verán reflejados en nuestros vinos con tonalidades colorimétricas de antocianos vivos y estructuras tánicas elegantes y de granulometría fina.
Las bajas temperaturas durante las noches, facilitan la respiración de las plantas, optimizando el metabolismo de los ácidos, necesarios en vinos de alta calidad enológica.
Ciclos Vegetativos / Estadíos fenológicos
Cada variedad se comporta diferente en su ciclo vegetativo en el Valle y más aun cuando lo comparamos con otras zonas de Mendoza o Argentina.
Cada año tiene su particularidad dependiendo de las temperaturas, clima, humedad, disponibilidad de agua y radiación solar; factores fundamentales para un buen desarrollo de la planta.